Factores del suelo invariables:
Esto quiere decir que con una vez hay suficiente.
La textura del suelo:
La textura señala la proporción de partículas de diferente tamaño que hay en el suelo. De forma familiar charlamos de suelos gruesos, suelos finos, suelos con mucha arcilla, etcétera
Efectuar un análisis de textura te puede dar información extra y asistir a los técnicos a aconsejarte mejor en temas como manejo del suelo y en el análisis de fertilidad de suelos.
A nivel técnico-científico las texturas se dividen en 4 grandes conjuntos conforme la proporción de arcillas, limos y arenas de los suelos. Las categorías son:
- suelos arcillosos
- suelos areniscos
- suelos limosos
- suelos francos (ninguna fracción predominante).
Puede haber asimismo suelos entre 2 categorías, por servirnos de un ejemplo, suelos franco-arcillosos.
El pH del suelo: la estabilidad es la clave
El pH es un factor químico que señala si una materia es ácida o bien básica. La escala de resultados va de 0 a catorce. Siendo los suelos de pH siete neutros, los de más de siete básicos y los de menos de siete ácidos. Como más cercano a 0 es el valor, más ácido es el suelo y como más cercano a catorce, más básico.
El pH afecta a la disponibilidad de nutrientes y al desarrollo de los cultivos. Los suelos con pH muy extremos no son fértiles en tanto que no hay nutrientes libres para las plantas.
Factores poco variables: una vez cada 5 años
Materia orgánica: la clave para un suelo fértil
La materia orgánica es clave para tener un suelo fértil y productivo. La materia orgánica del suelo son aquellos compuestos del suelo que son orgánicos. Grosso modo se puede saber si un suelo tiene mucha materia orgánica observando el color: los suelos oscuros acostumbran a tener más materia orgánica.
La materia orgánica afecta muchas propiedades del suelo y aumenta la actividad biológica. Ayuda a hacer libres los nutrientes del suelo para la planta, sostiene el pH del suelo estable y reduce el peligro de erosión.
Hay diferentes acciones que se pueden hacer para acrecentar o bien reducir la materia orgánica de un suelo. Por esto es interesante hacer un análisis de suelos agrícolas de forma periódica. Cada cinco o bien diez años, por poner un ejemplo. Estos análisis de materia orgánica son en especial interesantes si se hace alguna acción para acrecentarla, como la aplicación de estiércol o bien la siembra directa.
En la tabla se puede ver de qué manera interpretar los resultados de materia orgánica del tu suelo. Para tener un suelo fértil y de calidad interesa tener un nivel medio o bien alto. En la mayor parte de zonas agrícolas de España los suelos tienen un nivel bajo o bien bajísimo de materia orgánica del suelo.
Conductividad eléctrica: saber la salinidad de tus suelos
Como sabes, los cultivos no medran adecuadamente en suelos salinos. En verdad, en zonas muy salinas del Val del Ebro es preciso hacer riego localizado usual para lavar las sales de la zona de las raíces en frutales.
Los suelos se pueden salinizar debido a aguas con muchas sales disueltas y falta de buen drenaje. Esto sobre todo ocurre en regadíos de zonas áridas. Por esto es esencial calcular en el riego una fracción de lavado.
En zonas de secano con una sola medida de la conductividad puede bastar. En regadío, es un factor que puede cambiar. Por esto es interesante hacer análisis periódicos cada cinco-seis años.
El fósforo: la clave del desarrollo
Como sabes, el fósforo es uno de los macronutrientes que requieren los cultivos para medrar adecuadamente. Conforme la humedad, la temperatura del suelo y el género de raíces del cultivo este va a poder detener aproximadamente fósforo del suelo.
Por esta razón la interpretación de las análisis de fósforo en suelos son complejas. Conforme las zonas y los cultivos existen diferentes tablas de interpretación.
El fósforo es poco móvil en el suelo, de ahí que efectuando un análisis cada cinco años basta para saber qué nivel tienes en tus suelos.